El otro día me pasaron un articulo sobre una pareja gay (varones) que alquilaron un vientre en India. El articulo pretendía emocionar. A mi solo me horrorizo.
El caso brevemente era el de dos hombres Argentinos que contactaron una agencia de alquiler de vientres en la India, viajaron, hicieron todo el procedimiento y fueron el día del nacimiento del bebe, un varón, a buscárselo y traerlo para acá. ¿Lo van a querer? ¿Lo criaran bien? ¿Será feliz? Todas esas preguntas no tienen respuesta porque nadie las sabe, sean los padres gay o hetero, es lo mismo. Lo que queda muy claro y en evidencia es la aberración del procedimiento.
¿Por qué la India? Y, fácil, por el nivel de pobreza. No seamos crédulos por favor, casi ninguna mujer va a prestar su vientre y tener un hijo para otros si no es por necesidad (esta lleno de madres substitutas que lo hacen por altruismo por ejemplo eeeen....SUIZA!). En la India no quedan dudas de por que es, solo hay que ver las fotos. Estas pobres mujeres prestan sus vientres y paren bebes, algunas en cantidad, para el que puede pagarlos, como si fueran mercancías y ellas probablemente reciben chirolas al lado de las fortunas que hacen los médicos y las clínicas de fertilidad. ¿Eso no es explotación del mas debil? Una mujer a la que solo le queda como opción embarazarse y vender el fruto de ese embarazo, que resulta ser su hijo, al que llevo nueve meses en la panza, para poder sobrevivir, para poder tener para comer, comprarse alguna casita de mierda para ella y quizás, sus otros hijos… no esta siendo explotada y hasta abusada en su ignorancia? ¿La compra-venta de bebes (porque no son adoptados, son comprados) no es trafico de personas? Me sorprende que la gente, que se la pasa pontificando, poniendo mensajitos conmovedores en Facebook, hablando de igualdad, inclusión, solidaridad, protección al mas pobre, sea la misma que después subroga un vientre en la India, en el norte de Argentina (si señores, acá es ilegal, pero se hace si tenes la guita y los contactos) o en cualquier otro lugar adonde la pobreza provee mujeres que harían cualquier cosa (hasta he leído que recibían como paga bicicletas y radios en un lugar en el norte) También me molestan los que, sin llegar al acto de subrogar, avalan estas conductas y se emocionan hasta las lagrimas con la historia sin hacer un mínimo de análisis de nada. Siendo los gay una parte de la población que con todo derecho pide aceptación, inclusión y respeto, no tienen, al igual que otras parejas hetero, ni la mas mínima consideración (o COMPASION) por la pobre Hindú de la historia. Les chupa un huevo. Compran algo precioso, que es demasiado precioso para ser comprado, pasando por sobre los derechos de ese bebe y de esa madre, que de no tener necesidad, no lo hubiera engendrado y se cagan en todo porque quieren un hijo. Yo digo, si no quieren adoptar y ante la imposibilidad de procrear entre dos del mismo genero (disculpen pero a la hora de la genética, la igualdad de géneros se fue al carajo) ¿no seria mas honesto pedirle a una amiga? ¿Hermana? Total, es un favor… Ah, no, claro… ninguna querría, no? O casi ninguna… Que quilombo! Majo, ¿como se te ocurre? Es más fácil poner la guita y que al niño en cuestión lo “fabrique” alguna mujer allá en la India, alguien a quienes ellos no tengan ni que verle la cara. Es más fácil. Pagamos y chau. Después volvemos con nuestro hijo y seguimos luchando por los derechos humanos, apoyando causas nobles vía Facebook y apretando “me gusta” ante la foto de la Madre Teresa con un desnutrido niñito Hindu en sus brazos… La señora Hindú que parió a mi hijo, con el cual según la ley de subrogación en la India, no pudo tener el mas mínimo contacto (¡un bebe recién nacido no pudo ser colocado en el pecho de su mama por ley, por Dios!), ya quedo lejos, lejos… tengo lo que quería. Hipocresia, individualismo, egoismo... No creo que la Madre Teresa estuviera muy de acuerdo.
“O brave new world that has such people in it…”
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